sábado, 14 de julio de 2012

Todos por el bosque

TODOS POR EL BOSQUE


ESCENA PRIMERA

Antes de que los niños se sienten a ver el teatro, el guardabosques debe situarse dentro del tronco del árbol e introducir los brazos en las ramas para asumir su papel de viejo árbol.

El sol brilla.

El árbol bosteza, se despereza y se sorprende de que haya tantos niños.

Árbol:

Hola, amiguitos!. ¡Qué suerte tengo de que estéis aquí!. En ocasiones, me siento un poco triste, por estar solo, sobretodo en invierno que mis hojas se han caído y los nidos me abandonan. ¿Qué os parece si os cuento una historia que pasó aquí hace años, cuando aún era yo un árbol joven? Todos los días no tengo tanto público para que me escuche y me haría mucha ilusión. ¿Os la cuento?

Niños: ¡Siiiiiiiiiii!

(Cada vez que salga un personaje, sonará una música para alegrar la historia y luego se irá bajando para que se oiga lo que dicen. Lo que dicen, será cantando y lo apropiado sería que estas canciones presentación estuviesen previamente grabadas a fin de que se escuchen perfectamente y a un volumen suficiente y que los personajes cantaran en Play Back)

Árbol:

En primer lugar os presentaré a todos los que por aquí solían pasar. Allí vivían animales; mis mejores amigos eran: Ris, Ras y Plaf. El pobre Plaf, siempre se caía y si lo consolábamos no se levantaba porque se ponía blandito; la única forma de que se levantara era gritándole:¡Arriba!, ¡Arriba!, ¡Arriba!, tres veces. ¿Lo gritaréis si se cae?

Niños: Siiiiiiiiiiiii

Árbol:

Pués aquí vienen (música y salen Ris, Ras y Plaf bailando; cuando baja la música, cantan con la música de los siete enanitos de Blancanieves)

Ris, Ras, Plaf:

¡Ay go, ay go!, el bosque es nuestro hogar
Respirando aire en libertad
¡Ay go! Soy Ris, Soy Ras, Soy Plaf (Plaf se cae al suelo)

Plaf:

¡uaaaaaaaaaaaa! (se restriega llorando los ojos)

Árbol:

Vamos a animarle amigos gritándole tres veces arriba; a la una , a las dos y a las tres

Niños:

¡Arriba, arriba, arriba!

(Plaf se levanta y se sacude y continúan cantando)

Ris, Ras, Plaf:

¡Ay go, ay go!,gracias a Nicolás
todo marcha bien, vivimos en paz
¡Ay go! Soy Ris, Soy Ras, Soy Plaf (Plaf se cae al sueño)

Plaf:

¡uaaaaaaaaaaaa! (se restriega llorando los ojos)

Árbol

Vamos a animarle amigos gritándole tres veces arriba; a la una , a las dos y a las tres

Niños:

¡Arriba, arriba, arriba!

(Plaf se levanta y se sacude y se marchan)

Árbol:

Os preguntaréis sobre quién es Nicolás; era el guardabosques pero a él os lo presentaré el último, ahora os voy a presentar a Joaquín; En el pueblo cercano al bosque vivía Joaquín, un muchachito muy bueno que, después de hacer sus deberes, venía al bosque a ayudar a Nicolás y era muy curioso que le gustara tanto venir al bosque porque padecía de una extraña alergia a una preciosa flor que crecía por allí. Cada vez que olía esa flor, estornudaba tres veces y había que retira la flor y decirle:¡Salud, salud, Joaquín! Si estornuda Joaquín, ¿le diréis eso?

Niños: Siiiiiiiiiiii

Árbol:

Pués aquí viene (música mientras sale; luego se baja y él canta con la melodía de “Pinocho fue a pesar”)

Joaquín:

Yo me llamo Joaquín
de Nícolas aprendiz
pues me apasiona el bosque
lo verde me hace vivir (mientras canta se ha ido acercando a la flor que hay sobre el árbol que habla)
¡Atchís, atchís, atchís!

Árbol:

Chicos, a la de una, a la de dos y a la de tres

Niños: ¡Salud, salud Joaquín!

(Joaquín continúa cantando después de limpiarse la nariz)

Joaquín:

Cuido a los animales
y cortafuegos preparo
con consejos valiosos
a campistas orientamos. ¡Atchís, atchís, atchís!

Árbol:

Chicos, a la de una, a la de dos y a la de tres

Niños: ¡Salud, salud, Joaquín!

(Joaquín se marcha después de limpiarse la nariz)

Árbol:

También del pueblo venían a menudo tres pilluelos (hijos de Carrasco, el dueño de la humeante fábrica) y éstos no venían precisamente ayudar. A pesar de todas las trastadas que hicieron, nos hartábamos de reir. Había uno de ellos al que cada vez que se agachaba, se le veían los calzoncillos de corazones, porque llevaba unos pantalones muy grandes que siempre se le caían.

Cada vez que se agache reíros y veréis la vergüenza que le da y cómo se quiere marchar; pero reíros con ganas de verdad. ¿Lo haréis?

Niños: Siiiiiiiiiiiiiiiii

(Suena la música y salen los tres pilluelos. La música baja y comienzan a cantar con la melodía de Mamá yo quiero, mamá yo quiero saber….)

Pilluelos:

Je, je yo quiero
je, je yo quiero
ir al bosque a fastidiar
matar los bichos,
romper las ramas
sin preocuparme de lo
que pueda ensuciar. (bailan y al agacharse se le ven a uno de ellos los calzoncillos de corazones)

Árbol:

Chicos, vamos a reirnos, a la de una, a la de dos y a la de tres

Niños: ¡Ja, ja, ja, ja, ja!

(El avergonzado intenta marcharse pero uno de sus compañeros lo detiene de la chaqueta y continúan cantando)

Pilluelos:

Si el guardabosques
si el guardabosques
no se halla ahora por acá
haré destrozos
sin importarme
que daño le hago a este paraje natural (bailan y al agacharse se le ven a uno de ellos los calzoncillos de corazones)

Árbol:

Chicos, vamos a reirnos, a la de una, a la de dos y a la de tres

Niños: ¡Ja, ja, ja, ja, ja!

(El avergonzado se marcha y sus compañeros le siguen hasta que desaparecen)

Árbol:

También había una fábrica justo al lado del río, dirigida por un gran empresario de apellido Carrasco a quién lo único que le importaba era el dinero y deseaba arrasar el bosque para construir allí su gran imperio industrial. Y cada vez que se asomaba a la puerta tenía la dichosa puntería de pisar alguna caca de animal y gritaba: ¡Uaj!, ¡este bosque es un asco!

Y el guardabosques y Joaquín cuando lo escuchaban, escondidos detrás de los árboles, le gritaban a su vez: ¡Pues vete, Carrasco!. ¿Vosotros le gritaréis eso?

Niños: Siiiiiiiiiiii

Árbol:

¿Qué le gritaréis?

Niños: ¡Pues vete Carrasco!

Árbol:

Ya viene, atentos ( suena la música y sale Carrasco todo trajeado cantando con la melodía de la canción “vamos a contar mentiras, tralará”)

Carrasco:

Ahora que no me oye Nicolás
Ahora que Joaquín aquí no está
Os diré lo que yo quiero ¡Miedo da!
Arrasar el bosque entero ¡ja, ja, ja!
Y adueñarme del terreno.

Montaré un imperio ¡Sí, señor!
Que me de dinero a mogollón;
Que me importan estas plantas ¡qué más da!
Tanto bicho a mí me cansa ¡qué más da!
Si el dinero no me falta. (en ese momento pisa una caca)

¡Uaj, qué asco

Niños: ¡Pues vete, Carrasco! (y se va con cara de asco y limpiándose la caca en la hierba)

Árbol:

Y en último lugar y no por ello el menos importante, os presentaré al guardabosques Nicolás. A veces, se emociona tanto con lo que habla, que lanza sin querer el palo que lleva, hacia atrás y en ocasiones, le ha dado a algún animal o a alguien en la cabeza. A veces, no lo encuentra; si le pasa eso gritarle: ¡detrás, detrás, Nicolás! ¿Cómo gritaréis?

Niños: ¡Detrás, detrás, Nicolás!

Árbol:

Pues atentos, que ya viene (El guardabosques sale como si hubiera estado escondido detrás del árbol, cuando en realidad ha estado interpretando el papel del árbol, mientras suena la música. La música se baja y el canta con la melodía de la canción: Fantasmas a gogó)

Nicolás:

Cada día vengo al bosque
Con ganas de trabajar
Mi trabajo Guardabosques
Y mi nombre Nicolás

Pues las plantas y animales
Flora y fauna nuestras son
los cuido con gran esmero
pues quiero un bosque mejor

Estribillo

Si vienes al bosque
debes procurar
no hacer ningun fuego
jamás ensuciar

El bosque es de todos
y salud nos da
cuídalo con mimo
o el horror vendráaaaaaaaaaa (lanza sin querer al levantar las manos, el palo hacia atrás )

¿Dónde está? ¿Dónde está?

Niños: ¡Detrás Nicolás!

Nicolás: Perdón (coge el palo y se esconde detrás del árbol asumiendo su papel de árbol)

Árbol:

Bueno, amiguitos, ya os he presentado a los implicados en la historia que os voy a relatar a continuación. Atentos, atentos (suena la música que iniciará la segunda escena)


ESCENA SEGUNDA

El sol

Se oye el canto de los pájaros; de pronto aparecen los tres pilluelos con un radiocassete al hombro y una música heavy a toda voz, acallando el canto de los pájaros. Se sientan; sacan un bocadillo y tiran el papel al suelo; beben un refresco y tiran la lata al suelo; abren una lata, comen y la tiran al suelo. Apagan la radio y cantan la primera estrofa de su canción. (Música: mamá yo quiero, de parchís)

Pilluelos:

Je, je yo quiero
Je, je yo quiero
ir al bosque a fastidiar
matar los bichos,
romper las ramas
sin preocuparme de lo
que pueda ensuciar. (bailan y al agacharse se le ven a uno de ellos los calzoncillos de corazones)

Niños: Risa escandalosa

Se van.

Salen los tres animales cantando la primera estrofa de su canción.

Ris, Ras, Plaf:

¡Ay go, ay go!, el bosque es nuestro hogar
Respirando aire en libertad
¡Ay go! Soy Ris, Soy Ras, Soy Plaf (Plaf se cae al suelo)

Plaf: ¡uaaaaaaaaaaaa! (se restriega llorando los ojos)

Niños: ¡Arriba, arriba, arriba!

(Plaf se levanta, pero sigue llorando y muestra su dedo sangrando)

Ris: ¿Qué te pasa Plaf?

Ras: ¡Sangre, sangre! (grita dando vueltas alocadamente)

Plaf: ¿sangre? (y hace como si se tambalease del miedo a la sangre y sus amigos le sujetan para evitarlo)

Ris: Te llevaremos ante Nicolás; él sabrá qué hacer.

Ras: ¡Mira, por allí llega Joaquín!. ¡Joaquín, ven, es una emergencia emergencial animal de animalandia!

Joaquín: ¿Pero qué dices? ¡atchís, atchís, atchís!

Niños: ¡Salud, salud, Joaquín!
Joaquín: llevémoslo a Nicolás

(Entre todos llegan al árbol protagonista y en ese instante aparece Nicolás con una herramienta al hombro. Los ve y se horroriza

Nicolás: ¿Qué ha pasado? Traed, traed que lo curaré. (hace un curetaje de betadine y tirita, mientras escucha lo que Ras quiere contarle)

Ras: Verás Nicolás, estábamos nosotros tres, los tres inseparables, los tres superanimales, los tres….

Nicolás: Acaba, Ras

Ras: jugando, cuando escuchamos un ruido ensordecedor en el bosque y nos dirigimos valientes pero asustados a ver de dónde procedía. Cuando llegamos ya no se oía nada y…

Ris: Se cayó

Plaf: Me caí, si, si

Ras: y Plaf….

Ris: se cortó

Plaf: me corté, se, se

Nicolás: ¿con qué te cortaste Plaf?

Plaf: con un bicho raro brillante con dientes afilados como el de los linces (Ris le muestra la lata a Nicolás)

Joaquín: Estoy seguro que han sido los tres pilluelos; los hijos de Carrasco

Nicolás: ¡Estoy harto! ¡Me las van a pagar! (grita alzando los brazos y lanzando la herramienta hacia atrás) ¿dónde está?

Niños: ¡Detrás Nicolás! Detrás Nicolás

(Nicolás coge la herramienta y se dirige hacia la fábrica, mientras Joaquín y los animales se esconden detrás del árbol, asomando sus cabezas para presenciar lo que se avecina)

Nicolás: (Llama a la puerta de la fábrica con los nudillos y de forma enérgica y espera volviéndose hacia sus amigos y haciendo con la mano el gesto de: Ya veréis la que le voy a montar)

(Se abre la puerta y sale Carrasco)

Carrasco: ¿Quién llama a mi puerta? (con voz de pocos amigos) Ah, es Don Nicolás, igual que has venido, muy pronto te irás.

Nicolás: ¡Qué simpático!. No estoy para bromas; otra vez han resultado heridos los animales del bosque por las basuras que van esparciendo tus malcriados hijos por el bosque, además de contaminar con el ruido de la radio.

Carrasco: qué miedo me das. ¿qué me vas a hacer? (simulando miedo, pero riéndose de él)

Nicolás: La próxima vez te denuncio

Carrasco: (se abalanza sobre él cogiéndole del pecho) Ni se te ocurra (al dar un paso, pisa una caca de animal). Uaj, qué asco

Nicolás y Niños: ¡Pués vete, Carrasco!

(Carrasco se mete en la fábrica y cierra la puerta; Nicolás se reúne con el niño y los animales en el bosque)

Nicolás: Tengo un plan.(se ponen en corro y cuchichéan algo)

ESCENA TERCERA

Sale la Luna. (Joaquín, Nicolás y los animales se desplazan sigilosamente y cargados con unos sacos a las puertas de las casas del pueblo y esparcen basura (papeles, botellas…..) por delante de las mismas. De la misma forma que vienen se van.

ESCENA CUARTA

Sale el Sol.(Se abren una de las ventanas de las casas; se despereza uno de los pilluelos y observa con horror los que hay ante su puerta)

Pilluelo 1: ¡Ah! ¿Qué es esto? ¡Qué asco!

(Se abre la otra ventana)

Pilluelo 2: ¿Por qué gritas, bruto?; me has despertado ¡Ah!,( grita al percatarse de la suciedad).

Pilluelo 3 (sale de detrás del panel); seguro que ha sido Nicolás y su banda probos-qué(pega un salto y al agacharse se le ven los calzoncillos).

Niños: risa escandalosa

Pilluelo 1: ¡Vamos a papá! Él sabrá qué hacer (y se dirigen con paso decidido a la fábrica; llaman a la puerta; sale el padre)

Carrasco: ¿Qué os pasa? Os veo alterados

Pilluelo 2: Ven, ven y verás (y casi a empujones y tirando de su brazo lo conducen a la puerta de la casa)

Carrasco: ¡Maldita sea! Habrá sido Nicolás

Pilluelo 3: eso mismo hemos pensado nosotros

Carrasco: ¿Y cómo no lo he visto yo esta mañana?

Pilluelo 1: saldrías dormido como siempre, papá

(Carrasco le da una colleja a su hijo, enfadado)

Carrasco : Se van a enterar. Venid, que tengo un malvado plan. (se ponen en corro y cuchichéan; De pronto se separa del grupo, levanta y pie y grita: ¡Uaj, qué asco!

Niños: ¡Pues vete, Carrasco!

ESCENA QUINTA

El sol

(Ris, Ras y Plaf, junto con Joaquín se hallan en el bosque sentados jugando a algún juego de manos, tranquilamente; Desde su escondite, entre la maleza, los tres pilluelos, atacan con tirachinas a nuestros amigos)

Ris: ¡Ay, qué ha sido eso! (dice rascándose la cabeza)

Ras: ¿el qué? (pregunta Ras levantándose) ¡Ay!, (simula que recibe otro chinazo en el hombro)

Plaf: ¿Pero qué os pasa a vosotros dos? (salta Plaf; a esto que recibe un chinazo en el culo y cae al suelo)

Niños: ¡Arriba, arriba, arriba!

Joaquín: Viene de por allí (dice señalando al fondo del bosque) ¡Salid cobardes!

Pilluelo 1: No somos cobardes. Aquí estamos.

Joaquín: ¿por qué dañáis a los animales? No os han hecho nada malo ¡Atchís, atchís, atchís!

Niños: Salud, salud, Joaquín

Pilluelo 2: No hace falta que nos hagan nada; con sólo existir molestan. ¿o acaso no ves cómo estornudas en su presencia?

Pilluelo 3: Apestan

Joaquín: No estornudo por ellos, sino porque tengo alergia a esa flor roja.¿Por qué no os vais de aquí?

Pilluelo 1: De eso nada; os vais vosotros

Ris: ¡Jamás!

Pilluelo 2: Eso ya lo veremos. ¿Qué pasaría si os echáramos de aquí?

Ras: No nos iremos jamás. Aquí está nuestro hogar, nuestras casas

Pilluelo 3: Estaban (y enciende una cerilla y la tira al suelo)

Nicolás (aparece en ese mismo instante y sale en su persecución a ahuyentarlos). ¡Gamberros!, no volváis por aquí nunca más (mientras, los animales y Joaquín se apresuran a apagar la cerilla con pies). Os las veréis conmigo (amenaza Nicolás alzando las manos y tirando sin querer el palo hacia atrás ) ¿Dónde está?

(Los tres pilluelos corren a los brazos de su padre, Carrasco que los espera en la puerta de la fábrica).

Pilluelo 1: ¿Qué te ha parecido papá?

Carrasco: No ha estado mal hijo, pero no habéis podido incendiar el bosque por culpa de Nicolás. Ya me vengaré. (y se meten en la fábrica).

Niños: Detrás Nicolás

Nicolás: Gracias chicos. Esto ha ido demasiado lejos ( dice dirigiéndose a los animales, a Joaquín y a los espectadores). Tenemos que hacer algo. ¿Nos ayudaréis?

Niños: ¡Síiiiiiiii!

Nicolás: He decidido ir a denunciar el caso a las autoridades y he pensado que podríamos luchar por salvar el bosque ¿Estáis de acuerdo?

Niños: ¡Síiiiii!

Nicolás: Bien. Ven Joaquín ayúdame a traer unas cosillas que tengo preparadas. (Los tres animales se quedan perplejos en el escenario mientras Joaquín y Nicolás desaparecen y luego aparecen cargados; los animales hacen gestos de no saber de qué va la cosa).

Nicolás: Toma (dice repartiendo unas pancartas a los animales y dándole a Joaquín unos panfletos le dice que los reparta entre los espectadores). (Comienzan a dar vueltas al escenario pasando por delante de la fábrica donde los miran enfadados los pilluelos y Carrasco y por delante del público para enseñarle a decir lo que pone la pancarta)

Ris: ¡Salvemos el bosque!, ¡Salvemos el bosque! ( Ris, Ras, Plaf, Joaquín y Nicolás, dan una vuelta completa gritando lo que pone el cartel de Ris).

Ras: ¡Basura no queremos!, ¡Basura no queremos! (Los cinco dan una vuelta completa gritando lo que pone el cartel de Ras)

Plaf: ¡No más ruido!, ¡No más ruido! (los cinco dan una vuelta completa gritando lo que pone el cartel de Plaf)

Joaquín: ¡El río cristalino!, ¡El río cristalino! (los cinco dan una vuelta completa gritando lo que pone el cartel de Joaquín)

Nicolás: ¡La fábrica a otro lado!, ¡La fábrica a otro lado! (los cinco dan una vuelta completa gritando lo que pone el cartel de Nicolás)

(Los pilluelos y Carrasco se meten en la fábrica y cierran la puerta. Nuestros protagonistas se sientan exhaustos en el suelo del bosque con cara de no saber si funcionará todo el esfuerzo puesto en salvar el bosque)

Sale la luna. Nuestros protagonistas recogen panfletos y carteles tirados por el suelo y se van.)

ESCENA SÉPTIMA

(Sale el sol)

(El río está negro de contaminación de los residuos de la fábrica. Los tres pilluelos salen con su tirachinas a hacer de las suyas. Uno resbala y cae al fango del río.)

Pilluelos:
Je, je yo quiero
Je, je yo quiero
ir al bosque a fastidiar
matar los bichos,
romper las ramas
sin preocuparme de lo
que pueda ensuciar (el último de la fila, de los tres, resbala y cae al río)

Pilluelo 3: ¡Socorro, sacadme de aquí!

Pilluelo 1: No te preocupes hermano, allá vamos

Pilluelo 2: (Saca una cuerda larga de su mochila y se la lanza). ¡Agárrate a la cuerda!

(Pero tirando los dos, no pueden sacarlo)

(Llegan los animales, Joaquín y Nicolás y se van sumando a tirar de la cuerda; finalmente se une su padre y entre todos consiguen salvar al niño)

Carrasco: ¡Uf!, menos mal que te hemos salvado hijo,( llora abrazando a su hijo medio ahogado)

Pilluelo 3: no podía salir; la grasa hacía que el río pareciese un agujero de arenas movedizas

Nicolás: Afortunadamente, no ha pasado nada. Todo se ha quedado en un gran susto

Carrasco: Gracias amigos, de no haber sido por la ayuda de todos, mi hijo no estaría aun con vida.

Joaquín: lo hemos hecho con gusto, pero tus gracias no nos sirven para limpiar el bosque y el río

Nicolás: Queremos acciones concretas.

Carrasco: Vosotros ganáis; os ayudaré

Nicolás: Nosotros ganamos y vosotros también, no lo olvides. Mantener el bosque frondoso y cuidar el hábitat de estos animales nos beneficia a todos, ya que cada bosque es un pulmón para que nuestro planeta respire mejor.

Carrasco: Me habéis convencido. Estoy sinceramente arrepentido de mi actitud codiciosa y os prometo que lucharé junto a vosotros para que a este bosque se le considere Parque Natural y, por supuesto trasladaré mi fábrica a otro lugar donde perjudique menos.

Nicolás: la fábrica no sólo perjudica menos por cambiarla de sitio; tendrás que informarte y ver la forma de que contamine menos, tanto a nivel de aire como de agua; ya que la quema de petróleo y carbón aumenta excesivamente el efecto invernadero y los residuos tóxicos que van a los ríos y al mar contaminan nuestras aguas, perjudicando tanto a seres humanos, como a la flora y fauna de nuestro planeta.

(Nicolás y Carrasco se estrechan la mano)

Carrasco: Trato hecho

(Joaquín y los tres pilluelos se estrechan las manos y los animales trotan alrededor gritando de alegría)

ESCENA OCTAVA

El Sol

Los tres pilluelos y su padre derriban la fábrica , tumbándola y todos aplauden

Niños: ¡Bien!

Nicolás: ¿Qué os parece si cantamos entre todos la canción del bosque?

Niños: ¡Síiiiii!

Nicolás: Pués adelante; 1, 2 y 3

CANCIÓN
(Música: “Angelito de ojos tristes”)

Si quieres el aire puro,
nunca cortes, nunca quemes
los verdes pinos,
nunca cortes, nunca quemes
pues son pulmones,
pues nos ayudan
a respirar mejor,
a respirar mejor
Recicla siempre:
papel, cartón
y si pueden vente a plantar
un arbolito,
pon tu granito
únete a este cantar

No ensucies jamás el agua
ni los suelos de los bosques
no dejes vidrios
que se incendiarán de golpe
ten precaución,
la fauna y flora
te lo agradecerán,
protegerlas podrás.
Recicla siempre:
papel, cartón
y si puedes vente a plantar
un arbolito,
pon tu granito
únete a este cantar;
y así tu ayudarás

Salva el bosque, salva el bosque

(Al final de la canción y en fila se cogen de las manos y saludan arriba y abajo. Mientras los personajes chocan las manos de los niños y se van retirando, Nicolás disimuladamente asume su papel de árbol. Creo que debería sonar una música para hacer que los niños quedasen atentos, antes de hablar él)

Árbol: ¿os ha gustado mi historia?

Niños: ¡Síiiiiiii!

Árbol: Pues ya sabéis, si otro día os apetece, venid al bosque y os cuento otra. A mí me encantaría. ¡Adiós amiguitos y amiguitas! (grita saludando con sus ramas)

Niños: ¡Adios!

(Música del principio, para que los niños se vayan retirando)

FIN



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